¿Cómo empezamos? Para nosotros ya es un folklore este comienzo: comenzamos con un fuerte abrazo de bienvenida, reencuentros, sonrisas, charlas, mates y con ganas de seguir creciendo juntos como cuerpo sólido y lleno de espiritualidad.
Empezamos la hermosa mañana dominguera con la presentación y la bienvenida de los nuevos soñadores voluntarios: Georgina, María, Emmanuel y Agustina. Bienvenidos!!! Después de esta hermosa presentación seguimos con una oración guiada por quien les escribe. La base de la oración estuvo en la lectura de la 1ª Carta a los Corintios 12, 12-28. Las reflexiones que surgieron fueron las siguientes: el grupo como único "Cuerpo"; cada uno es parte integrante de ese cuerpo (oído, pie, mano, hombro, espalda, etc.) necesario para actuar, para servir, para ayudar a los demás y ayudarse así mismo; unión, fortaleza, cooperación entre todos; buena dependencia y protección; el cuidado del cuerpo si llegase a sufrir algún inconveniente. También brotaron algunas preguntas: ¿Qué parte del cuerpo me considero que soy a la hora de ayudar a la sociedad/ a mis amigos/ al grupo?; ¿Qué dones o talentos tengo o pienso que tengo para ayudar a los demás como voluntario?. Entre todos formamos un solo cuerpo, nos nutrimos entre todos, nos necesitamos para formarlo, cada uno pone su granito de arena, su talento, su don para caminar juntos. Pero este cuerpo que formamos también necesita alimentarse, y entonces ¿cuál es nuestro alimento?, ¿cómo se alimenta el grupo?. A los que se respondió, Dios es nuestro alimento espiritual en lo cotidiano y se refleja en el que tengo ahora a mi lado, en mi salesiano acompañante, en mi amigo, en los niños, en la naturaleza, en la pequeñas cosas, en una sonrisa, en mi familia, en una mano amiga… Para terminar escuchamos cuatro canciones para seguir meditando y encontramos palabras y frases que llenaron nuestro corazón. "Son los artistas" y "Desde arriba" de Víctor Heredia; "Hay gente que sueña", de Teresa Parodi y "Lo que Usted necesita" de Fandermole.
El almuerzo fue lo que prosiguió, algo rápido a la canasta…sí, sí, sí, algunos sándwiches y alguna que otra tarta caserita. Sin olvidar las ricas galles que Caro llevó para el mate de la media mañana. Continuamos con una charla extensa cuyo contenido esencialmente estuvo integrado por planteos, acuerdos y organizaciones para los meses venideros. Determinamos fechas tentativas de encuentro, de misión, de reuniones para futuros proyectos. Más tarde nos tomamos un momento libre llenándolo con juegos y risas. Hubo, por supuesto, ganadores y perdedores, a quienes les tocó alguna prendita y obviamente, lo que caracteriza a este grupo, "mucha alegría". Para terminar la jornada vimos la primera secuencia de la película "Patch Adams", aproximadamente los primeros 15 minutos, presentado por Juan Pablo. Es una película llena de temas hermosos para reflexionar. Entre ellos la idea del "problema" y la "solución". A veces no vemos la solución porque vivimos pensando en el problema. Algo tan simple y tan complicado en su esencia misma. Cuántas veces nos pasa que estamos tan atareados, tan acelerados, sin saber que lo único que tenemos que hacer es frenarnos un poco y comenzar a pensar que la vida acelerada no nos lleva a nada. Vivimos bajo una tormenta, siendo que la calma está dentro nuestro. Buscala, solo tenés que frenarte un poquito y meditar el problema, reconocerlo y solucionarlo: la solución muchas veces está más cerca de lo que pensás. A partir de la película se resaltó la frase principal y eje de la charla: "¿Cuántos dedos puedes ver? No te enfoques en el problema…". Después llovieron otras: "el hogar"; "la tormenta"; "la persona más allá del problema"; "No te centres en el problema, de esa manera nunca hallarás la solución…"; "Tienes que ver lo que los demás no ven…"; "Ver el mundo de forma nueva…".
Para despedirme les dejo de regalo algunas estrofas de la canción "Son los artistas, equilibristas" de Víctor Heredia. …Aplausos y fracasos, ahí están los artistas, Mariana, Encargada de Comunicación del MJS de |
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